CEBM
Resultados:
En personas de la comunidad con sospecha o COVID-19 confirmado, ¿existen características demográficas, síntomas o signos que sean factores predictores de necesidad de ventilación o atención en UCI o para de mortalidad por todas las causas a 30 días? 20/04/2020. Seleccionan 5 guías clínicas y 4 revisiones sistemáticas. No informan la evaluación de la calidad de las guías. Para las RRSS emplean AMSTAR-2.
Las RRSS ofrecen un variado abanico de modelos. Pero, o se ciñen a la edad pediátrica (2 de ellas), o presentan modelos de discutible aplicación en el Reino Unido.
Además los modelos no se informaron correctamente. Todos tenían un alto riesgo de sesgo (probablemente demasiado optimista), algunos modelos no se validaron internamente y ninguno había sido validado externamente, por lo que las predicciones de los modelos podrían ser inadecuadas cuando se aplican en la práctica diaria.
Ninguna de las guías clínicas discute el uso de una herramienta o sistema de puntuación. Dos guías informan características de pacientes similares y superpuestas que tienen alguna evidencia de que están asociadas con peor pronóstico: aumento de la edad, sexo masculino, tabaquismo, comorbilidades que incluyen enfermedades cardiovasculares, diabetes, hipertensión, enfermedad pulmonar crónica, enfermedad renal crónica, enfermedad hepática crónica, obesidad, inmunosupresión y cáncer. Estas pruebas derivan principalmente de series de casos y estudios de cohortes predominantemente de China, principalmente de atención secundaria y, por lo tanto, de aplicabilidad limitada en el entorno de atención primaria del Reino Unido.
Una guía describe, para los médicos en atención primaria, tres herramientas específicas: CRB65, ROTH y NEWS2. Ninguna ha sido validada con pacientes COVID-19.
Conclusiones:
Algunas características demográficas y condiciones de comorbilidad se asocian con un peor resultado de COVID-19. No son fiables como predictores para indicar qué pacientes requieren ingreso hospitalario. Los médicos de cabecera tendrán que confiar en el juicio clínico combinado con una comprensión de qué evidencia está disponible.
No se encontraron pruebas con respecto a los signos físicos asociados con la mortalidad o la necesidad de ingreso hospitalario.
Referencias bibliográficas: